Mil veces gracias, Sexi Boy

Mil veces gracias, Sexi Boy

¡¡Hola a todos!! Cuánto os he echado de menos… ya sabéis que la vida de una perrita como yo es super ajetreada, pero como todo en esta vida es ponerse manos a la obra.

Quiero contaros una historia, pero una historia real, de las que se recuerdan para siempre, de las que ayudan a superar los momentos no tan buenos. Y qué mejor historia que la que está protagonizada por un compañero maravilloso de viaje, un amigo de 4 patas, un angelito caído del cielo llamado Sexi Boy.

Sexi ya no esta con nosotros, por lo menos en presencia, porque ha dejado en todos los que lo conocimos un trocito de él en nuestro corazón. Un Golden Retriever precioso, con un pelo blanco y largo de modelo canino, y un carácter difícilmente superable.

Sexi tenía casi 14 añazos y le encantaba venir con sus hermanitos y su papi Sebastián a Vida Animal. Con el paso del tiempo sus visitas eran para ver a nuestras veterinarias, y aquí es donde yo como perrita que soy me deja el mejor regalo que me podía dejar: la enseñanza y lección de vida que durante estos meses hemos sentido junto a él.

¿Cuántos de nosotros nos levantamos muchos días de la semana resoplando porque no nos apetece salir de nuestra cama?

¿Cuántos de nosotros a la mínima que sentimos dolor o malestar estamos quejándonos sin cesar, aunque sea un simple dolor? 

¿Cuántos vivimos la vida como lo que es, un regalo, y disfrutamos el sonido de los pájaros o un simple paseo?

Quien conoció a Sexi sabe que él sí que lo hacía. Los últimos meses le costaba caminar, ya que tenía los huesecitos muy dañados por la edad,¿y sabéis que?

Nunca se quejaba, sabíamos que le dolía, pero él quería salir y disfrutar del pequeño paseo que podía dar, porque entendía que la vida está para vivirla y no para sufrirla.

Nunca lo escuchamos quejarse, ni en sus últimos suspiros junto a Sebastián. Sabía que se iba junto la persona que más había amado en toda su vida, y lo creía así porque sabía que la diferencia entre la vida y la muerte no es solo estar vivo, hay mucho más. Le encantaban las chuches que le dábamos, incluso estando malito nunca las rechazaba. Era todo un caballero, y unas chuches que te regala una mujer siempre deben ser aceptadas.

Esta es la lección de vida que nos deja Sexi Boy, y no es una carta con melancolía y tristeza, porque estamos seguros que llegó a nuestra vida para sacarnos una sonrisa en los momentos buenos y en los no tan buenos. Para explicarnos que los problemas son problemas si nosotros queremos, y que la vida está para disfrutarla y sacarle el mayor jugo. Él lo hizo así, y por eso deja en nosotros ese gran recuerdo.

Sexi, esto no es una despedida, porque sabemos que a ti no te gustaban. Es un hasta luego, por eso cuando te dimos nuestro último adiós, Feli, nuestra auxiliar que tanto te quería, te dejo junto a ti un puñado de esas galletas que tanto te gustaban, porque sabemos que seguro un dia te las volveremos a dar mientras tú mueves tu cola como un loco.

P.D: Todos los compañeros y amigos de Vida Animal te echamos de menos, y te agradecemos todo lo que hiciste por nosotros. Hasta que nos volvamos a ver, SEXI.