Enviado por fernando el
Normalmente el día a día y el poco tiempo que dedicamos a pensar en si lo que estamos haciendo es lo más apropiado o lo que realmente nos beneficia a medio o largo plazo hacen que finalices el día sin saber si estás eligiendo conscientemente tus acciones o si estás siendo víctima de las creencias absorbidas durante años.
Te propongo un ejercicio durante esta lectura, ¿te atreves?
Te invito a que seas 100% consciente de que tu perro o mascota solo vive el ahora. Exacto, no el pasado ni el futuro, única y exclusivamente el presente. No piensa qué es lo que ocurrirá después del paseo, o si esa tarde llegarás una hora más tarde. Vive el presente en su totalidad; y te propongo que la observes como un alumno modelo observa a su maestro.
Te dejamos 3 consejos que harán que tu vida sea más plena junto a tu perro:
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El paseo y las prisas son polos opuestos
Cuando nos levantamos y sacamos a nuestro perro normalmente funcionamos en automático. Somos robots, queremos que hagan sus necesidades rápido y a seguir el día, que tengo prisa para ir a trabajar, llevar a los niños, etc. Levántate 10 minutos antes, que te aseguro que no te van a mejorar en nada el día. Disfruta de un paseo con consciencia, sin prisas, escucha música que te relaje, evita los pensamientos de lo que debes hacer después y te estresa. Mira a tu mascota, es su momento y el tuyo y os lo merecéis. Recuerda que con el estado de ánimo con el que comienzas el día es muy probable que se desarrolle ese día.
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Tu perro es agradecido
El agradecimiento es uno de los hábitos que menos llevamos a la acción en el día a día, pero nuestro peludo agradece constantemente.
Te vas y vuelves a las 4 horas, él te recibe saltando y contento. Te vas y vuelves a los dos minutos porque se te olvidaron las llaves del coche. No importa, él te agradece que hayas vuelto.
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Las mascotas no juzgan
Vas paseando con tu peludo por el parque y a lo lejos ve a otro perrito, ¿qué hace? Se acercan a olerse y a conocerse. Es una acción muy similar a la de los niños, siempre se quieren conocer, no generan una idea preconcebida antes. Otra gran lección de la naturaleza.
¿Qué opinas sobre esta reflexión? ¡Esperamos que te sirva para extraer algunas de las enseñanzas que podemos aprender de nuestras mascotas!
